Llueve el aire
Como lavando el alma,
Llevándosela,
A ver si en otro lado nace!
Mojando de infinito las miradas,
como tarde lluviosa.
Todo flota,
todo es mar profundo.
Y en las azoteas incendiadas,
las nubes cuelgan,como sábanas olvidadas
Suspirando como el viento,
Hinchadas de ausencia.
Abajo, rinocerontes pastan tranquilos,
Mientras sus lomos se mojan de nada.
Gabriel Pacheco
1 comentário:
Olá Auxília
visitei e gostei. imagens oníricas e boas poesias. obrigado. bjo.
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